"¿QUE ES HACER CONSCIENTE LO INCONSCIENTE?. IV.- Sobre las Censuras"

Como se ha podido ver, desde el paso del sistema Inconsciente al Consciente existen grandes deformaciones, ya que además del sistema Inconsciente Consciente, existe un sistema Pre-Consciente. 

Un acto psíquico pasa por dos fases de censura, una de lo Inconsciente a lo Pre-Consciente y otra de lo Pre-Consciente a lo Consciente. Si en la primera fase es rechazado, le será negado el paso a la segunda fase y permanecerá inconsciente. Si sale triunfante, pasa a la segunda fase, aún cuando su relación con la conciencia no quedará fijamente determinada. Queda en un estado de “es capaz de conciencia” y se tienen que cumplir ciertas condiciones para conseguirlo. 

En este proceso existen muchas variantes y ejemplos que demuestran que la conciencia presenta relaciones complejas con los otros sistemas y con la represión. Por ejemplo, las fantasías y las formaciones sustitutivas presentan alto grado de organización, están exentas de contradicción y son cualitativamente similares a los productos del sistema consciente. Las fantasías son las fases preliminares de formación de sueños y síntomas, son productos que permanecen reprimidos y no pueden llegar a la consciencia a pesar de su alto grado de organización. Quedan cerca mientras la carga sea poco intensa, pero al alcanzar intensidad son rechazadas. Las formaciones sustitutivas acceden a la consciencia si existen circunstancias favorables.

                           ¿Qué significa, entonces, “ser consciente”?

En el Inconsciente la pulsión está enlazada a una idea o estado afectivo, es decir tiene un representante. Para devenir objeto de la consciencia solo puede hacerlo a través de este representante, sin embargo, en este proceso pueden existir "errores de interpretación", ya que esta representación de la pulsión puede verse coartada por la represión. Cuando esto sucede debe enlazarse a otra idea para acceder a la consciencia. Este hecho tiene tres destinos: Uno, que el afecto ligado a la representación (factor cuantitativo) perdure parcial o totalmente; Dos, que se transforme en otro montante de afecto, cualitativamente diferente; Tres, que sea suprimido, coartado en su desarrollo. Este último destino sería el verdadero objetivo de la represión.

Con la represión queda separado el afecto de su idea (represión recae sobre ideas) después de lo cual sigue cada uno de estos elementos su destino particular. El afecto solo surge hasta después que se consigue exitosamente una nueva representación en el sistema consciente. De esta manera se establecen dos estados de energía en la vida anímica: la energía ligada y la móvil, esta última presiona por la descarga. La contra-carga protege al sistema pre-consciente contra la presión de la idea Inconsciente, ya que mantiene la represión y se cuida de constituirla y conservarla.

Aún cuando la idea reprimida se encuentra en un estado de ser “inconsciente” puede producir efectos que llegan a la conciencia. Si bien todo lo reprimido permanece inconsciente, no forma por sí solo todo el contenido de lo Inconsciente

El Inconsciente tiene un alcance más amplio.



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